Se recomienda dar "Play" al tema al final de la pagina para una mejor ambientación, gracias.
25 de agosto del año 2300, 6:00 AM, allí estaba despertándome para dar comienzo cómo de costumbre a un largo día en la oficina. Escucho explosiones, deben ser producto del aturdimiento, últimamente he estado durmiendo pésimo. Sin darle importancia me voy camino al servicio cuando de repente la contestadora automática detiene mis pasos.
- Usted tiene tres, mensajes nuevos.
¿Mensajes a este horario y tres? Me sentía un poco confundido, pero un segundo más parado frente a la puerta del baño y largaría todo el orín ahí mismo, primero lo primero ¿O no? Tras hacer mi higiene diaria y alistar mi ropa, fui directo a la sala dispuesto a escuchar esos mensajes qué con tanta confusión rondaban en mi cabeza, ¿Sería Natalia? No lo creo, estaba de viaje y sin móvil.
Llevando mi mano diestra junto a mi dedo indice recto apreté el botón rojo.
- Primer mensaje nuevo -Emitió la maldita contestadora mientras mi mente quedaba en blanco- Era mi padre el cual no veía hace mucho ¿Justo ahora, por qué apreté el botón rojo? Dicen qué no debemos apretarlo.
Contestadora: Tomás, hijo, siento llamarte luego de tanto tiempo encontré la tarjeta qué me diste con tu número y no dude un segundo en llamarte.. Espero qué sigas teniendo el mismo número, algo extraño esta sucediendo en la ciudad y temo qué lo mismo este pasando en tu lugar.. No.. No sé cómo explicarlo, en la televisión están diciendo qué estamos siendo atacados...
Ahí me detuve y comencé a pensar, las explosiones qué escuche. ¿Sera eso? Fui a mirar por la ventana y ahí lo vi, humo, gente corriendo y un gran color anaranjado invadía el cielo. Cómo podría estar pasando, debía averiguarlo y así fue, seguí escuchando los mensajes.
- Segundo mensaje nuevo... Hijo! Por favor contesta! Dicen qué no es un simulacro, tu madre ha insistido qué no era nada y se fue al supermercado, aún no ha vuelto. Por favor llama, no quiero perder a alguien más!
No me ha llamado en años, ahora me llama y requiere de mi contestación ¿Cómo es esto posible? Sin escuchar el tercer mensaje busque en el detector de llamadas su número, tras encontrarlo lo marque con gran rapidez a estás alturas hasta a mi me tenía anonadado la situación.. Vamos, carajo atiende.. -Tu tu tu tu, sonaba del otro lado- Intente llamar a emergencias para pedir información pero las lineas estaban todas saturadas. Escuche el tercer mensaje y ahí estaba mi respuesta...
- Tercer mensaje nuevo... AAARGH! -Resonó por toda la sala- Ayúd...ame hijo. Usted no tiene mensajes nuevos.
Ahí es cuando camino hacía atrás y me choco con mi tan preciada mesa tirando ese hermoso jarrón qué tanto me costo conseguir. Corrí rápidamente hasta la habitación tirando toda mi ropa formal y poniéndome lo primero qué encontré. Mi madre desaparecida, mi padre posiblemente muerto. Natalia.. Ella, solo espero qué se encuentre bien. Tomo las llaves del coche y salgo hacía el garage, me subo, lo prendo y abro la puerta con el control a distancia. Vamos, vamos ¡Abre! Me arrepentí de mis palabras, cuantos había ¿Cinco, diez quizás? Eran todos vecinos ya qué vivíamos en un barrio tipo rotonda nos veíamos todos las caras, ellos vieron la mía a través del cristal, pero sus caras demostraban algo extraño. Comencé a tocar el claxon pero en ese momento todos se me abalanzaron sobre el capot. No me quede a averiguar qué carajo querían, de por sí odiaba a todos esos malditos y la semana entrante me iría, bueno ¿Qué mejor oportunidad para irnos ahora? Quemando caucho salí a toda maquina, solo debía manejar recto, tomas de agua sacudiendo liquido para todos lados. Esto iba enserio...
Continuara...
Continuara...
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